Ir al contenido principal

FORMAS CLÁSICAS

FORMAS CLÁSICAS




La estructura de sonata/trío/cuarteto/sinfonía, etc. en el Clasicismo deriva de la Suite Barroca. Con respecto a aquellas siete danzas de la Suite, la sonata constará de tres o cuatro movimientos, que generalmente seguirán la alternancia de tempi rápido-lento-rápido; intercalándose en caso de ser cuatro movimientos un Minueto o Scherzo, única danza superviviente de las originarias de la Suite.



Forma de sonata

La forma sonata bitemática-ternaria, que entendemos como forma sonata moderna, viene de la forma sonata monotemática-binaria que fue desarrollada como sabemos por Scarlatti en el siglo XVIII, y sigue básicamente el esquema:
II: Tónica à Dominante :II  II: Dominante à Tónica :II

Tradicionalmente se considera a Carl Philip Emmanuel Bach el iniciador de la sonata bitemática -moderna- que luego sería desarrollada y ‘perfeccionada’ por Haydn, Mozart y Beethoven (Plá 1987:116).

El aspecto que origina, por tanto, la articulación de la forma de sonata es en primer lugar la modulación al tono de la dominante y, sólo después, la contraposición dramática de los dos temas. Este aspecto debe ser muy tenido en cuenta para llegar a una comprensión profunda de esta forma y será determinante para entender la lógica formal de la sonata desde Haydn (cuyas obras tempranas a menudo presentan un único tema principal -monotemáticas-), a las sonatas románticas y posrománticas (donde encontramos a menudo tres grupos temáticos con sus respectivas tonalidades y elementos motívicos contrastantes). Las diferentes regiones tonales nos darán la articulación formal.

Es importante tener en cuenta que, aunque la forma sonata es una forma tripartita (Exposición – Desarrollo – Reexposición), tiene un carácter completamente opuesto a la forma ternaria simple que llamamos de Lied (A-B-A’), aún cuando algunos autores establezcan un símil entre ambas. En una forma A-B-A’ la sección central pretende ‘contrastar’ con las secciones que la rodean, y a veces este contraste puede limitarse a lo más sencillo: el modo. Sin embargo, en una forma de sonata, el contraste ya existe dentro de la propia Exposición (tonal y, por lo general, temáticamente), y la sección central desarrollará estos elementos que ya han sido previamente expuestos en su tonalidad para después volver a exponerlos en la tonalidad principal.

A este respecto atenderemos también a la cuestión armónica:
“aun cuando una forma sonata tiene tres secciones inconfundibles, siendo la tercera en su aspecto temático una recapitulación completa de la primera, estas dos secciones son absolutamente diferentes en el aspecto armónico: la primera pasa de la estabilidad armónica a la tensión y nunca concluye en tónica, mientras la tercera es una resolución de las tensiones armónicas de la primera y, exceptuando las modulaciones secundarias, se mantiene durante todo el tiempo esencialmente en la tónica” (Rosen 1994:30)

En este sentido se suele considerar que la sonata deriva de una forma de danza binaria, respecto a la forma ternaria que se manifestará en el caso de la llamada forma Lied.


Si bien la forma sonata puede aparecer en cualquiera de los movimientos de una pieza clásica -con la excepción del minueto- será por excelencia la forma que presente un primer movimiento (salvo contadas excepciones como la sonata Claro de Luna de Beethoven) y, frecuentemente, la del tempo rápido final.


La estructura básica de una forma de sonata es la siguiente:

||: A (puente) B :||: Desarrollo – A’ (puente) B’ :||


- Introducción (opcional). Puede aparecer, ocasionalmente, y a menudo en un tempo más lento que el que tendrá propiamente el movimiento.

Exposición:
-  Sección A. Tonalidad principal
-  Puente. Material nuevo, del tema A, del B (como preparación) o incluso mezcla de los dos anteriores.
-  Sección B. Nunca en la tonalidad principal. Antes de Beethoven la tonalidad del tema B era siempre la de la dominante de la tonalidad principal, o la del relativo mayor si la ésta estaba en modo menor. Beethoven introduce posteriormente otras opciones.
Puede estar formado por varios elementos temáticos, en cuyo caso distinguiremos entre b1, b2, b3... Es frecuente que haya tres grupos en B, de los cuales el segundo tenga un carácter más transitorio y el tercero más conclusivo.
-  Repetición de la exposición. Cae en desuso a finales del Clasicismo.

-  Desarrollo. Completamente libre en lo que respecta a las tonalidades. En general, es de tipo modulante y juega con uno de los dos temas principales, e incluso con los dos. Generalmente termina con la dominante de la tonalidad principal, para dar paso a la Reexposición. A esta última sección del desarrollo donde ya estamos claramente regresando a la tonalidad principal se le llama habitualmente retransición.
El punto culminante en una forma sonata se encuentra generalmente pasada la mitad del desarrollo, cuando llegamos al lugar armónicamente más lejano y comenzamos el ‘camino de vuelta’ hacia la Reexposición.

-  Reexposición, total o parcial, de la exposición. La diferencia principal entre ambas es que el tema B estará ahora en la tonalidad principal. Es habitual que aparezcan, por ejemplo, cambios de modo.

-  Coda opcional. En la tonalidad principal. Si la exposición dispone de una coda, puede  que sea la misma en ambos casos, aunque ahora en la tonalidad principal; o bien que aparezca una coda nueva. Especialmente a partir de Beethoven la Coda adquirirá el sentido de un segundo desarrollo, aunque será de menor extensión.
 
-  Repetición del Desarrollo y la Reexposición juntos. Esta idea, herencia de la forma binaria tipo suite, cae en desuso incluso antes que la costumbre de repetir la exposición, debido a su mayor longitud.




Tiempo lento


El tiempo lento suele ser el segundo de los movimientos de una sonata clásica, pero también es relativamente frecuente que se altere su posición con la del minueto, resultando el tercero. Es el movimiento que más formas diferentes acostumbra a presentar, siendo las más comunes las que desarrollaremos a continuación: lied ternario, lied desarrollado y forma sonata sin desarrollo; pudiendo ser igualmente un tema con variaciones, un forma binaria o incluso un movimiento en forma de fuga.


Forma sonata sin desarrollo


[ A (puente) B   (…)   A’ (puente) B’ ]

Responde básicamente a un esquema idéntico al de la forma de sonata, con la diferencia de que no habrá sección de desarrollo, o ésta se verá sustituida por un enlace breve. No olvidemos que un segundo movimiento también podría presentar una forma sonata completa. En ambos casos, debido al carácter del movimiento, los temas serán, por lo general, más líricos y de mayor alcance melódico -por lo tanto menos desarrollables- de lo que habrían sido en un primer movimiento.
Serán frecuentes las codas de cierta extensión.



Forma lied ternario (ternaria simple)

[ A – B – A’ ]


Sección I. Puede tener forma primaria, binaria, o ternaria. En caso de ser ternaria:

Frase principal. Empieza en la tonalidad principal y termina en la misma o más habitualmente en la dominante/relativo mayor. Repetición.
Transición modulante, con elementos motívicos nuevos o derivados de la frase anterior.
Frase principal finalizando en el tono principal. Repetición del b y del a’ juntos.
||: a :||: b a’ :||

Sección II. Carácter secundario. Elementos nuevos o derivados de la primera sección. Función contrastante.

Sección III. Reexposición total o parcial de la primera sección, a veces ampliada con un pequeño desarrollo. Tonalidad de origen.




Forma lied desarrollado


[ A – B – A’ – C – A’’]


Lied ternario que se prolonga con 2 nuevas secciones:

Sección IV. Características similares a la sección II, pero independiente de ella.
Sección V. Similar a I y III. Coda opcional.

Puede darse el caso de que el tema secundario de las secciones II y IV sea el mismo, acercando el Lied desarrollado al esquema bitemático de las secciones de una Sonata:
A – B – A’ – B’ – A’’.




Minueto o Scherzo

[ A – B – A’ ]


Sección I (A). “Minueto”. Ritmo ternario.
a. Tema inicial que termina en la tonalidad de la dominante o el relativo mayor. A veces también en el tono principal.
Repetición.
b. Episodio, derivado del anterior o con material nuevo.
a’. Reexposición, total o parcial, del tema principal.
Coda opcional.
Repetición de b y a’.
||: a :||: b a’ :||

Sección II (B). “Trio”. Forma igual al anterior.

Sección III (A’). Reexposición de la sección I, sin repeticiones.

Coda opcional.

Excepcionalmente las secciones pueden tener también forma primaria o binaria, especialmente la segunda sección.




Tiempo rápido final


Ya sea el tercero o el cuarto, el último movimiento suele ser el más veloz de los que componen la sonata, siguiendo la estructura de alternancia rápido-lento-rápido.
Las formas más típicas para este movimiento serán el Rondó simple, el Rondó-sonata o bien, como ya hemos comentado, forma sonata propiamente. Cuando se trate de una forma sonata, generalmente la densidad y complejidad de sus temas así como el crecimiento en el desarrollo será menor que en un primer movimiento, justamente por la mayor brevedad y velocidad del movimiento.
Pueden aparecer al igual que en el segundo movimiento la forma de variaciones o la de fuga, aunque generalmente con otro carácter.


Forma de Rondó simple

La forma de Rondó simple es lo que denominamos una forma estrófica, donde se alterna un tema principal con distintos “estribillos” o fragmentos intermedios.
En este caso, al contrario que en la forma de sonata, hablaremos más propiamente de Tema que de Sección, ya que suele ser más breve y compacto, cerrado en sí mismo.

[ A – B – A’ – C – A’’]


- Tema A. Tonalidad principal
- Tema B. Fragmento libre de menor importancia
- Tema A. Tonalidad principal
- Tema C. Fragmento libre, similar al Tema B aunque habitualmente con material distinto.
- Tema A. Tonalidad principal.




Forma de Rondó-sonata

Resulta, como su propio nombre indica, de la hibridación entre un Rondó simple y una forma de sonata, incluyendo una reexposición del tema secundario B y una sección C asimilable al desarrollo:
[ A – B – A’ – C – A – B – A’]


-  Tema A. Tonalidad principal.
-  Tema B. Tema nuevo. Puede estar formado por más de 1 elemento. Tonalidad afín, diferente de la principal.
-  Tema A. Completo o en parte. Tonalidad principal.
-  Tema C. Elemento nuevo, o bien desarrollo de los anteriores. Constituye la parte de desarrollo correspondiente a la forma sonata.
-  Tema A. Reexposición total o parcial.
-  Tema B. Reexposición del tema B en tonalidad principal.
-  Tema A. Completo o incompleto. Puede incluir un desarrollo del elemento temático del
mismo tema A.
- Coda opcional.


En el caso del Rondó-Sonata, especialmente en Mozart, es frecuente eliminar la repetición del tema que sigue al desarrollo, que ya ha sido repetido lo suficiente, quedando una reexposición ‘invertida’: ABA’ C BA








Bibliografía:

Bas, J. (1977). Tratado de la forma musical. Ricordi Americana.
Caplin, W. E. (1998). Classical form: A theory of formal functions for the instrumental music of Haydn, Mozart, and Beethoven. Oxford University Press.
Plá, F.L. (1987) Guía analítica de formas musicales para estudiantes. Real musical, Madrid.
Rosen, C. (1994). Formas de sonata. Idea Books.
Zamacois, J. (1990). Curso de formas musicales. Labor, Barcelona.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Guía de la asignatura

ANÁLISIS V y VI (tercer curso) El tercer curso de análisis es el último en el que se abordan partituras que todavía puedan suscribirse a lo que tiene ‘centro tonal’ -siempre considerándolo desde un punto de vista amplio- y es el que espera cultivar en mayor grado la autonomía y variedad de recursos de que el alumno dispone para afrontar el análisis de una forma madura y completa. Como norma general, se trabajarán aquellos repertorios ubicados entre finales del siglo XIX y principios del XX; donde se produce una ruptura con los paradigmas del Romanticismo, y la ampliación progresiva de la tonalidad da paso dependiendo de los casos al neoclasicismo, a sistemas y procedimientos propios en cada compositor y, en general, a variados nacionalismos donde la recuperación de elementos populares lleva a la convivencia entre la modalidad y la tonalidad. Se producen igualmente nuevas concepciones de lo que es la forma, que evolucionan sobre la tradición y la transgreden de distintas maneras

Preludio a la siesta de un fauno - Debussy

Análisis formal: Preludio a la siesta de un fauno - Debussy